Violencia desmedida bajo censura del estado.

2007-05-31.
Silvio Benítez Márquez

Coordinador de las provincias occidentales del Partido Liberal Nacional Cubano

Después de observar y oír las noticias de aquel trágico y funesto crimen en la universidad de los EE.UU. que resultó en un desenlace fatal arrebatándole la vida a 32 seres indefensos, entre ellos gran parte jóvenes estudiantes que transitaban por una de las etapas de mayor efervescencia intelectual con la ilusión de convertirse en el futuro en paradigmas de esa sociedad y ejemplo dentro del seno familiar, no cejó un instante y rápidamente salió en escena la parábola del viejo caudillo, sin las más notas de decencia ante una barbarie como esta, para enfocarla y fomentar su política de ceguera y odio desmedido e intolerante ante el vecino.

Lo bueno de todo esto es la rapidez de la noticia sin censura, sin coartar la libertad de expresión y de prensa. Todo lo contrario a lo que acontece en Cuba, donde cada instante a lo largo y ancho de la isla acontecen hechos salvajes perpetrados por la violencia juvenil enterándose solamente de sus víctimas el sepulturero o el cirujano de guardia en cualquier centro médico de urgencias.

A tal punto ha llegado esta monstruosa y empeñosa violencia, que la podemos presenciar en cualquier lugar de la sociedad cubana. Ejemplo de ello, en las escuelas en el campo, discotecas, en las colas de toda índole, en los camellos. En fin, a todo momento y a toda hora y tratando de poder escabullirse, de no pasar a formar parte de la fila de víctimas de este mejumbre vandálico.

¿Por qué juzgar y criticar este hecho del vecino, si tu casa tiene candela por doquier, y no hay agua para frenar este aparatoso camino sin luz y sin los más elementales valores, creencias y actitudes del ser humano; podridos y alimentados por más de medio siglo por un ser completamente ateo, disociado de la palabra evangelizadora del señor y donde jamás tuvo en cuenta las consecuencias incalculables de la situación draconiana que vive, padece y sufre el pueblo cubano ante esta barbarie de brutalidad y violencia desmedida?