Roberto Calimano Robaina
30 de junio de 2007
La habana –www.payolibre.com/ El sábado 23 de junio al cumplirse el aniversario número 34 de la muerte de Enrique García Cuevas, en las cárceles del régimen castrista, un grupo de activistas de Derechos Humanos pertenecientes al Partido Popular Republicano (PPR) se encontraron en el poblado de Guanajay, municipio de la Provincia Habana.
La velada comenzó con las notas del Himno Nacional, seguidas por un minuto de silencio, en homenaje a este joven perteneciente al presidio histórico cubano que con firmeza enfrentó al sistema totalitario en los años 60 y 70, perdiendo la vida a los 52 días de una huelga de hambre en la cárcel provincial de Santa Clara, Las Villas.
Entre los presentes se encontraban parientes y ex-compañeros del presidio que resumieron en palabras emotivas las cualidades humanas de Enrique García Cuevas dentro de aquel escenario de violencia y muerte, donde mostró valor, sensibilidad y grandeza ante cada provocación; y resistió hasta el último aliento de su dolorosa e injusta muerte sin dobleces.
Los presentes clamaron: “!Libertad sin exclusión para todos los presos políticos! No se repitan los horrores sin nombre que padecieron los prisioneros políticos y familiares en aquellas décadas de ceguedad e ignominia que presagia revertirse en los presos del presente.”
30 de junio de 2007
La habana –www.payolibre.com/ El sábado 23 de junio al cumplirse el aniversario número 34 de la muerte de Enrique García Cuevas, en las cárceles del régimen castrista, un grupo de activistas de Derechos Humanos pertenecientes al Partido Popular Republicano (PPR) se encontraron en el poblado de Guanajay, municipio de la Provincia Habana.
La velada comenzó con las notas del Himno Nacional, seguidas por un minuto de silencio, en homenaje a este joven perteneciente al presidio histórico cubano que con firmeza enfrentó al sistema totalitario en los años 60 y 70, perdiendo la vida a los 52 días de una huelga de hambre en la cárcel provincial de Santa Clara, Las Villas.
Entre los presentes se encontraban parientes y ex-compañeros del presidio que resumieron en palabras emotivas las cualidades humanas de Enrique García Cuevas dentro de aquel escenario de violencia y muerte, donde mostró valor, sensibilidad y grandeza ante cada provocación; y resistió hasta el último aliento de su dolorosa e injusta muerte sin dobleces.
Los presentes clamaron: “!Libertad sin exclusión para todos los presos políticos! No se repitan los horrores sin nombre que padecieron los prisioneros políticos y familiares en aquellas décadas de ceguedad e ignominia que presagia revertirse en los presos del presente.”
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